La copropiedad se encuentra regulada por nuestro código civil y se define como la situación jurídica que se produce cuando la propiedad de una cosa pertenece proindiviso a varias personas. Hay comunidad cuando la propiedad de una cosa o de un derecho pertenece proindiviso a varias personas.
El vivir en comunidad implica que adquirimos unos derechos y unas obligaciones que bien aplicadas nos permiten tener una convivencia pacífica y placentera dentro de la copropiedad. Desafortunadamente es usual ver que hay copropietarios que se niegan a cumplir las normas considerando que tienen más derechos y menos obligaciones que otros por su situación económica, por su posición dentro de la sociedad o porque simplemente quieren imponer un equivocado liderazgo por cuenta de su descortesía con los vecinos, trabajadores y personal de administración.
En la historia de los seres humanos la aplicación de normas es una constante; desde la prehistoria hubo normas entre las comunidades humanas, las normas son una necesidad y emanan de un sentido hábil para ajustar la convivencia; los seres humanos necesitamos limitaciones y normas para convivir con las demás personas de nuestro entorno.
¿imagina una familia, o una sociedad sin normas? no seamos egoístas, seamos prácticos y si asumimos la decisión de vivir dentro de una copropiedad, acatemos las normas de la misma, respetemos a las personas que como los jardineros, personal de servicios generales, piscineros y personal de mantenimiento entre otros, nos ofrecen lo mejor de sí para que las zonas privadas y las zonas comúnes estén en perfecto estado de funcionamiento y presentación; percibe el no contar con ellos para cumplir con esas importantes labores?
Si definitivamente no somos capaces de vivir en comunidad, si no somos capaces de ayudar a construir, si nos molesta que nos impongan normas que benefician la convivencia, busquemos otra opción que nos permita ser felices y permita dar tranquilidad a los demás; de lo contrario iniciemos ya el cambio para que la comunidad nos reconozca como un “buen copropietario”.
Fuente: http://mipropiedad.online
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